Historia y Guitarra

La guitarra ha sido un instrumento vital de expresión cultural y social a lo largo de la historia. Preservadora generacional de tradiciones y costumbres. Revolucionaria inspiradora de movimientos sociales y políticos. Relatora influyente de experiencias cotidianas. En definitiva, un espejo de la sociedad para sus diferentes períodos históricos.

Su existencia se remonta a la antigüedad con la cítara griega y el laúd romano. La Edad Media marcó la evolución significativa a la guitarra morisca y gótica en Europa. El Renacimiento estandarizó el uso de cinco cuerdas dobles afinadas y se popularizó gracias a sus autores influyentes como Luis de Milán y Alonso Mudarra. En el Barroco relegó su popularidad por la prominencia del laúd o la viola da gamba, aunque Gaspar Sanz y Robert de Visée desarrollaron nuevas técnicas con el rasgueo y punteado. El Romanticismo posicionó del estatus popular al salón por los avances estilísticos de Fernando Sor, Dionisio Aguado o Mauro Giuliani. La Edad Moderna llegó con la innovación del diseño actual del guitarrero Antonio de Torres y del estilismo Francisco Tárrega. A partir de aquí, la guitarra explosionó hacia nuevos espacios inimaginables como parte de la evolución tecnológica.